Se suele decir que genios como Leonardo, Julio Verne o Steve Jobs fueron visionarios, personas con la capacidad de ver el futuro y hacer obras formidables gracias a ese talento. Pero, ¿y si esta afirmación no fuese del todo correcta? Desde luego el talento de estos creadores ha sido extraordinario, pero veámoslo desde otro punto de vista, es posible que sus fantásticas visiones fuesen fuente de inspiración y construyesen el presente tal y como lo conocemos hoy en día.
El futuro no está escrito, es un lienzo en blanco donde proyectamos nuestros sueños y nuestras peores pesadillas. Y las personas creativas podemos añadir una dimensión transcendente a nuestro trabajo del día a día tratando de imaginar, alertar, inspirar, y por qué no, construir ese futuro.
Bajo esta premisa surge Futurehaus, una fábrica de futuros, una plataforma donde los creativos a través de diferentes disciplinas, ya sea la escritura, el diseño o la ilustración, comparten sus visiones con el objetivo de inspirar e influir en la construcción de un futuro mejor.